A poco más de 40 Km. de Peñaranda se encuentra Arapiles. Un pueblo de Salamanca en el que tuvo lugar la Batalla de los Arapiles, el 22 de julio de 1812.
Concretamente en dos colinas de este municipio, conocidas como Arapil Chico y Arapil Grande. En esta batalla vencieron unos 50.000 soldados ingleses y españoles, comandados por el duque de Wellington, a otros 50.000 soldados de Napoleón, comandados por el mariscal Marmont. Aunque la guerra duró dos años mas, esta derrota marca el principio del fin de las tropas francesas en España y de su hegemonía en Europa.
Napoleón en España tuvo dos derrotas decisivas, la Batalla de Bailén en la que el General Castaños en julio de 1908 derrotó a las tropas del general Dupont, fue la primera derrota de Napoleón que hasta entonces parecía invencible, y la citada Batalla de los Arapiles que marcó el declive de Napoleón en el mundo, junto con las derrotas en Rusia, donde perdió mas de 500.000 hombres. La derrota definitiva de Napoleón tendría lugar en Waterloo (Bélgica), también ante el duque de Wellington.
Napoleón quería un amplio imperio que abarcara desde España hasta Rusia, y desde Egipto hasta Gran Bretaña, pero le faltaba este último país. Para conseguirlo decidió aislar Gran Bretaña del continente europeo, invadiendo Portugal a través de España. Para ello contó con el beneplácito del rey español Fernando VII, aprovechando que España le importaba muy poco. Pasó por España y se quedó, invadiendo todo el país menos Cádiz, donde se constituyó la Constitución de 1812.
España le resultó muy cara pues aunque la descabezó engañando a su débil rey, nunca pudo con el pueblo que se organizó en guerra de guerrillas, y con el apoyo de los ingleses lograron echar de España a los franceses.