13.- La Masonería -

La masonería es un movimiento filosófico, ideológico con contenido esotérico iniciático, transmitido para grupos de iniciados a quienes se les suministra una verdad en 33 grados hasta conseguir la plenitud. Abogan por construir un mundo demoliendo el existente, según sus palabras “el orden vendrá del caos” o “solve et coagula” es decir “disolver y coagular”

Los masones creen en el deísmo de tipo socrático, que es la creencia en una divinidad creadora no providente, ni revelada, que creo el mundo y desapareció, le llaman el gran arquitecto del universo. Se definen como sincretistas porque teóricamente acogen a todas las religiones pero en realidad se someten a dogmas relativistas de pensamiento único.

Aunque aluden al origen en gremios de constructores, incluso piensan que ya en el antiguo testamento hay indicios de masones, al menos la masonería regular nació en 1717 con la fundación de la gran logia de Anderson. En 1723 se aprobarán y publicarán las constituciones de Anderson en Escocia.

Su expansión será muy rápida al penetrar en el ejército, apareciendo en Canadá y EEUU, y de ahí pasó al continente europeo, concretamente a Francia y Alemania.

En España la masonería apareció con Napoleón, su hermano José Napoleón era gran maestre del gran oriente francés antes de ser rey ilegitimo de España.

El 18 de julio 1809 se creó la primera logia española en San Sebastián formada por oficiales franceses, y en octubre de ese mismo año se creó la primera formada por españoles en Madrid llamada Santa Julia. En agosto de 1812 José Napoleón abandonó Madrid y las logias desaparecieron casi todas.

En 1820 los liberales obligaron a Fernando VII a restablecer la constitución de 1812, se crearon logias de carácter revolucionario, y se rompieron las relaciones con la santa sede. El trienio liberal acabó cuando Francia envió a los 100.000 hijos de San Luis, que curiosamente estaban compuestos por masones.

A la muerte de Fernando VII, en el periodo de las regencias (1834-1843), tanto la de María Cristina de Borbón como la del general Baldomero Espartero, se vivirá la edad de oro de la masonería, que se prolongará principalmente en los periodos de gobierno de liberales radicales o exaltados durante el siglo XIX en toda España. Al decir toda España me refiero al territorio peninsular, más los virreinatos de América y las posesiones de oriente, (la masonería tendrá importancia en el movimiento independentista en toda América).

En 1836 tuvo lugar la llamada desamortización de Mendizábal, es decir la expropiación y subasta pública de las tierras de la iglesia. Mendizábal, que realmente se llamaba Juan de Dios Álvarez Méndez, se cambió el apellido para aparentar ser cristiano viejo porque Méndez era de origen judío, era masón de grado 33 además de ser el protagonista de la Revolución liberal y el arquitecto del propio estado liberal. También eran masones de alta graduación Prim y Amadeo I, que serán protagonistas de la historia política de España sobre todo entre 1865 y 1873.

Durante la Primera República, desde el año 1873 hasta la restauración de la monarquía en la persona de Alfonso XII en 1874, se sucedieron 4 presidentes todos miembros de la orden.

El borrador de la constitución de 1931 establecía la separación de la iglesia y el estado, con privilegios para la iglesia católica, y mantenía la enseñanza religiosa. Pero masones del PSOE y Esquerra lo cambiaron en la comisión constitucional. El artículo 26 eliminó la enseñanza religiosa, y expulsaron a las órdenes religiosas extranjeras, es decir a la compañía de Jesús que dependía del Vaticano, colocando a la mayoría católica fuera del texto constitucional.